Eslava

Eslava: un viaje entre ruinas romanas y viñedos

En el corazón de la Merindad de Sangüesa, a solo 56 km de Pamplona, se encuentra Eslava, una pequeña joya rural de la Zona Media de Navarra, con apenas 110 habitantes. Su población ha mostrado una notable estabilidad en los últimos años, reflejo de su arraigo y encanto duradero.

Su patrimonio más destacado es el yacimiento romano de Santa Criz de Eslava, la ciudad romana más monumental conservada en Navarra y un enclave clave para entender la presencia romana en tierras vasconas. Declarado Bien de Interés Cultural en 2016, Santa Criz permite visitar restos del foro, la necrópolis y estructuras urbanas que evocan la vida pública de aquella época.

Este tesoro arqueológico, descubierto oficialmente en 1917, está situado sobre un cerro estratégicamente elevado que ofrece unas vistas privilegiadas de los valles del Aragón y del Aibar. En origen fue un asentamiento prerromano, posiblemente comenzando con un castro vascón que se transformó en civitas romana durante el Imperio.

Pero Eslava no se detiene en el pasado. Su entorno está rodeado de naturaleza: suaves colinas, campos cultivados y senderos que invitan a perderse en el paisaje rural. La comarca de Sangüesa, donde se ubica, ofrece una atmósfera que parece desacelerar el tiempo ideal para quienes buscan autenticidad y calma.

La viticultura, ampliamente presente en esta zona de Navarra, añade otra dimensión a la experiencia local: visitas guiadas que combinan la exploración del yacimiento romano con catas de vino, una forma evocadora de conectar historia.

En definitiva, Eslava es mucho más que un pueblo con encanto: es un lugar donde la historia milenaria, la vida rural y el contacto íntimo con la naturaleza se encuentran con la autenticidad de su gente. Un destino ideal para quienes quieren aprender, desconectar y descubrir la belleza de lo sencillo.

Geografía

Limita al N con Ezprogui, al E con este término y el de Gallipienzo, al S con Ujué y al O con Lerga.

El municipio consta de dos pequeñas alineaciones serranas, una al N y otra al S, separadas por una parte central más baja y llana. La primera línea de sierras va desde el Monte Lerga (982 m) hasta las proximidades de Santa Águeda (863 m); la segunda culmina a 808 m. Hay una estrecha relación entre relieve y estructura: la parte serrana del N se corresponde con un sinclinal colgado, prolongación oriental del de Barásoain, y la del S con el frente abrupto de una cresta areniscosa (Oligoceno) modelada en el flanco S del anticlinal de Tafalla-Lerga, aquí profundamente vaciado por la erosión en las margas y arcillas de igual período, lo que explica la parte llana del centro del término municipal, en la que se conservan extensos manchones de glacis cubiertos de derrubios.

Puntos singulares de Eslava

Iglesia de San Miguel

Iglesia de San Miguel

Iglesia de origen medieval de hacia 1200 de la que se conserva la torre, columnas del coro, cripta y arco triunfal de la cabecera, además de lienzos de muro visible en el lado del Evangelio que en el siglo XVI recibió unas cubiertas de nervios, construyéndose también en ese momento la cabecera y el coro. Finalmente en el siglo XVII se construyeron las capillas, el edículo de la pila bautismal rehaciéndose también el alero. 

La planta es de una sola nave de tres tramos y cabecera plana. Dos capillas se abren en el tramo inmediato del crucero. Los alzados muestran los muros de buen sillar a la vista. El arco triunfal es apuntado, de sección cuadrangular muy potente y apoya sobre pilares con imposta lisa. Dos arcos dan acceso a las capillas, el de la nave del Evangelio es carpanel con el intradós decorado con casetones moldurados que llevan inscritos rombos; el arco apea sobre ménsulas molduradas sobre pilastras cajeadas. El del lado de la Epístola es de medio punto con casetones cajeados en la rosca y el intradós y apoya en pilastras lisas sobre impostas molduradas.

Frente a la puerta hay un edículo formado por pilastras cajeadas dóricas con su correspondiente arquitrabe que enmarcan un arco de medio punto que da entrada a un nicho con bóveda de cañón donde se alberga la capilla bautismal.

Ermita de Santa Bárbara

Ermita de Santa Bárbara

Se localiza en la parte alta del pueblo y se encuentra muy reformada.

Presenta planta rectangular de tres naves separadas por pilares de hormigón y techo plano de vigas. La sacristía queda adosada a la cabecera por el lado del Evangelio.

Al exterior, muros de sillarejo, cubierta a dos aguas y espadaña a los pies donde se encuentra una puerta rectangular.

Preside la ermita una escultura del siglo XVI de Cristo Crucificado de anatomía expresivista, y una Santa Bárbara moderna.

La pila de agua bendita con gallones es también del siglo XVI.

Crucero de Eslava

Crucero de Eslava

Localizado en la salida del pueblo en dirección a Lerga, corresponde al siglo XVI y se eleva sobre tres gradas cuadrangulares, pedestal prismático y fuste acanalado.

La cruz llevaba en el anverso el Crucificado entre María y San Juan y en el reverso la Inmaculada Concepción. Actualmente ha sido renovado, mostrando en el anverso un Crucificado moderno.